Representantes del Ayuntamiento, encabezado por el Alcalde, Juan Mari Aburto, y del “Foro Bilbao por la Paz y la Convivencia”, entre los que se encuentra Galo Bilbao, en nombre de la Diócesis de Bilbao han colocado hoy una nueva Placa conmemorativa en la ciudad. Ha sido un acto simbólico con el que se quiere que la Villa guarde en su memoria, y en sus calles, el recuerdo de todas las personas asesinadas por la violencia terrorista. En esta ocasión el homenaje se ha ofrecido a Fermín Monasterio Pérez, taxista vecino de Bilbao, asesinado a tiros por un miembro de la banda terrorista ETA, el 9 de abril de 1969. Fue la primera víctima civil de ETA que dejó una viuda y tres hijas huérfanas. Una de ellas, Dori Monasterio, es miembro de la comisión de Paz y Reconciliación de la Diócesis de Bilbao, cuyos integrantes han participado también en el acto.